Extracto libro “El poder de los hábitos” de Charles Duhigg
o
Porqué hacemos lo que hacemos en la vida y en la empresa
Los investigadores del MIT descubrieron un bucle definido en
nuestros hábitos
Señal ----->
Rutina ----> Recompensa
Cuando logras identificar los hábitos detrás de una
conducta, puedes buscar las formas de sustituirlas por nuevas rutinas.
Identificar la rutina
Lo primero identifica la rutina, o sea
la conducta que quieres cambiar, y escríbela. Por ejemplo: levantarte de tu
escritorio, ir a la cafetería, comprar una galleta y comerla mientras hablas
con los amigos.
A continuación vienen dos preguntas:
·
¿cuál es la señal? para iniciar esta
rutina: ¿hambre? ¿aburrimiento? ¿necesidad de detenerse antes de comenzar otra
cosa?
·
¿cuál es la recompensa? ¿es la
galleta? ¿el cambio de escenario? ¿la distracción temporal? ¿estar con los
compañeros? ¿la energía que se recibe con la galleta?
Para contestar hay que probar
Experimenta con
recompensas
Las recompensas son poderosas porque
satisfacen nuestros deseos. Y, suelen ser difíciles de identificar. La
sugerencia es experimentar con diferentes recompensas. Por ejemplo, salir y dar
una vuelta (en lugar de ir a la cafetería, o comer una manzana en lugar de una
galleta, o ir a hablar con amigos sin comer). Una a la vez, cada día. Día a
día. Haz una cosa diferente, conscientemente, y después de cada actividad, anota
las tres primeras cosas que se te vienen a la mente (emociones, pensamientos al
azar, reflexiones sobre como te sientes, o las primeras palabras que se te
ocurran). Luego coloca tu alarma para 15 minutos más y pregúntate ¿todavía
quiero hacer mi hábito? (por ej. todavía quiero comer una galleta). SI la
respuesta es sí, esa acción no fue la recompensa esperada. Si la respuesta es
no, pues ya hallaste la recompensa.
Cuando encontraste ya la recompensa, sólo
falta identificar la señal que desencadena el hábito.
Aislar la señal
Es difícil aislar una señal en particular,
porque en nuestra vida suelen haber demasiadas variables interactuando juntas.
Por eso es importante identificar las categorías de conductas con antelación
para hacer un escrutinio que nos permita detectar los patrones. Todas las
señales habituales encajan en una de cinco categorías:
·
Emplazamiento
·
Tiempo
·
Estado Emocional
·
Otras personas
·
Acción anterior inmediata
Entonces, justo antes de iniciar tu rutina,
escribe algo en estas cinco categorías, cada vez.
·
¿Dónde estás?
·
¿Qué hora es?
·
¿Cuál es tu estado emocional?
·
¿Quién más hay por ahí?
·
¿Qué acción ha precedido el impulso?
Al cabo de tres o cinco días, miras lo
escrito y tu padrón de conducta será bastante claro. Por ej. si siempre ocurre
a la misma hora, pues ya está, esa es la señal.
En este momento ya tenemos identificado el
bucle del hábito con claridad (has identificado la rutina, la recompensa y la
señal que la desencadena), ya podemos generar algo para reemplazar el viejo
hábito por otro.
Ten un plan
Hay que escribir el plan: que voy a hacer
cuando sienta la señal. Y buscar formas de ayudarse a tomar conciencia de él.
Por ej. colocar una alarma, o cambiar algo de posición, etc.
A veces el plan no funcionará, pero fíjese en
las sensaciones que tiene cuando logra seguir su plan. Notará una pequeña
satisfacción interior. Al cabo de un tiempo de perseverar, notarás que tu plan
comienza a funcionar sólo.
Así se ha transformado en un nuevo hábito, que ¡reemplazó
al anterior!